
Se fue enero, o casi. El euríbor está bajando a marchas forzadas, afortunadamente. El paro en Andalucía según los analistas de Unicaja puede llegar al 23% de la población activa a finales de año – un millón de parados -, o sea, uno de cada cinco andaluces en edad de trabajar no encontrará trabajo. ¡Virgencita, que me quede como estoy!.
Pues resulta que la Unión Europea ha desautorizado las palabras de Solbes, y la recuperación económica puede que comience a principios de 2010 y no a mediados de 2009. Según la UE, seremos los últimos en comenzar la recuperación económica. Con estos pronósticos se le quita a uno las ganas de todo. No es extraño que escuchando estas cosas la gente no consuma, por tanto no se dinamice el mercado pese a que Sebastián nos diga que consumamos productos españoles.
Por cierto ¿se han parado a pensar en qué se basa la economía?, no se basa en complicados mecanismos, siquiera en tecnología punta. Es sólo la CONFIANZA. Usted y yo solemos primero confiar en que nuestra moneda vale algo. Y desde los años 20 se abandonó el patrón de cambios oro – es decir, que la moneda se respaldaba desde los bancos centrales con una cantidad en oro, y era convertible. Pero debido a la gran cantidad de moneda que se puso en circulación tras la I Guerra Mundial se abandonó ese patrón. Entonces nuestra moneda ¿qué vale? Pues básicamente el valor lo determinamos en las relaciones diarias.
Las relaciones comerciales se basan en la confianza. Cuando esta confianza flaquea la gente se asusta y deja de mover su dinero. Y cierto es que vivimos tiempo difíciles, pero tampoco ayuda que la televisión machaque hasta la extenuación con la crisis económica. La crisis económica es una crisis de confianza.Si la elección de Obama sirve para devolver la ilusión y esa confianza perdida al mundo, bienvenido sea.
Pues resulta que la Unión Europea ha desautorizado las palabras de Solbes, y la recuperación económica puede que comience a principios de 2010 y no a mediados de 2009. Según la UE, seremos los últimos en comenzar la recuperación económica. Con estos pronósticos se le quita a uno las ganas de todo. No es extraño que escuchando estas cosas la gente no consuma, por tanto no se dinamice el mercado pese a que Sebastián nos diga que consumamos productos españoles.
Por cierto ¿se han parado a pensar en qué se basa la economía?, no se basa en complicados mecanismos, siquiera en tecnología punta. Es sólo la CONFIANZA. Usted y yo solemos primero confiar en que nuestra moneda vale algo. Y desde los años 20 se abandonó el patrón de cambios oro – es decir, que la moneda se respaldaba desde los bancos centrales con una cantidad en oro, y era convertible. Pero debido a la gran cantidad de moneda que se puso en circulación tras la I Guerra Mundial se abandonó ese patrón. Entonces nuestra moneda ¿qué vale? Pues básicamente el valor lo determinamos en las relaciones diarias.
Las relaciones comerciales se basan en la confianza. Cuando esta confianza flaquea la gente se asusta y deja de mover su dinero. Y cierto es que vivimos tiempo difíciles, pero tampoco ayuda que la televisión machaque hasta la extenuación con la crisis económica. La crisis económica es una crisis de confianza.Si la elección de Obama sirve para devolver la ilusión y esa confianza perdida al mundo, bienvenido sea.